Crisis recurrentes en la Familia y servicio de nuestro centro

La Familia  al igual que cualquier otro  grupo humano,  se compone de múltiples   relaciones de diversa índole y distinta intensidad,  sin embargo  cabe destacar que existen lazos específicos que unen a los diferentes miembros de una familia, ya sean lasos de consanguineidad,  lazos de filiación, etc.

Al igual que un ser vivo que pasa por diferentes etapas  desde su nacimiento hasta su muerte, la familia también atraviesa por un proceso de crecimiento,   con diversas fases  bien  definidas entre sí, cada una de ellas presenta sus tareas y dificultades propias.

Algunas de las etapas de la vida familiar, o “ciclo vital familiar” son: Galanteo o elección de pareja, matrimonio e inicio de la convivencia, llegada del primer hijo, familia con hijos escolares, familia con hijos adolescentes, salida de los hijos del hogar, nido vacío y años dorados. A modo de ejemplo podemos citar la etapa de la llegada del primer hijo en la que se producen importantes cambios en la rutina de la pareja, además de un desgaste físico importante, la atención y preocupación que la mujer entregaba a su pareja es direccionada hacia el bebé dejando de lado a su compañero, lo que si no es afrontado correctamente puede causar rupturas o problemáticas importantes. Algunas de las frases que suelen escucharse en este periodo son: “Ella como mamá es un 7, pero como esposa ya no se preocupa de mí”, o “desde que llegó nuestro bebé ando como estresada”.

Así también existen crisis durante todo el proceso de crecimiento de la familia.

A este tipo de problemáticas se les denominas “crisis normativas”, ya que son crisis normales en el desarrollo de la vida familiar, tienen la característica de ser universales (les suceden a todas las familias), predecibles ( Se sabe que vendrán y en que etapas) y no se pueden evitar  (por ejemplo no se puede evitar que los hijos crezcan).

Este tipo de crisis están  presentes en todas las familias y a pesar de ser parte del desarrollo normal familiar,  suelen ser fuente de grandes conflictos que pueden tener consecuencias devastadoras, sin embargo con una ayuda profesional adecuada pueden resolverse y ser una oportunidad para que la familia salga renovada. La idea es que la familia pueda realizar  los ajustes necesarios para poder afrontar la nueva etapa y no quedarse estancados en la etapa que están dejando (por ejemplo poder complementar el ser padres y pareja cuando llegue el primer hijo).

Además de las llamadas crisis normativas existen también aquellas que no son parte intrínseca del proceso normal de la familia y que suelen producirse por eventos externos al desarrollo  tales como algún accidente, alguna muerte, un robo, un incendio, etc. Estas reciben el nombre de “crisis no normativas”, frente a las cuales se hace necesario trabajar para restablecer el equilibrio familiar considerando la situación que se genera después del evento que dio origen a la crisis.

Otro tipo de crisis por las que atraviesan  algunas familias,  son aquellas que se generan  para que no se produzcan los cambios necesarios para la etapa de la vida en la que están entrando (Ej: padres que no quieren aceptar que sus hijos son adolescentes y no permiten que se comporten como tal, o familias que no quieren realizar ciertos ajustes necesarios frente a una situación de la vida). Este tipo de crisis llamadas “estructurales” son complejas ya que la definición de estas  familias es ser una familia en crisis recurrentes, por lo que los problemas son parte de la estructura misma  de la familia.

Finalmente las crisis de “desvalimiento” son aquellas que se originan cuando la familia depende de alguna persona que por algún motivo ya no está presente, motivo por el cual el grupo familiar entra en crisis( se va la persona que cuidaba a algún miembro enfermo, o algún pariente muy importante en términos funcionales ya no está en el hogar) La idea frente a este tipo de crisis es el poder restablecer el equilibrio familiar trabajando en suplir de forma sana la ausencia y distribuir las responsabilidades entre los que quedan en la familia.

Todos estos tipos de crisis que ocurren dentro de las familias necesitan ser tratadas a tiempo ya que de no serlo, pueden surgir problemáticas complejas; Por el contrario  si la familia reconoce que necesita una ayuda externa para “reordenar” las piezas familiares, la crisis puede realmente ser fuente de crecimiento: Cabe destacar que Crisis quiere decir oportunidad, sin embargo no siempre es tratada como tal y suele terminar en complicaciones.

Si no se tratan  o no se previenen pueden ser realmente complejas

Al describir las crisis familiares podemos pensar en que es similar a ir al doctor: Si la cosa está compleja hay que intervenir, pero en ocasiones la enfermedad recién comienzan por lo tanto la intervención es muy leve, sin embargo siempre es mejor prevenir cuando las cosas recién comienzan, o incluso antes de cualquier señal y para “reforzar la salud”.

A diferencia de ir al doctor para tratar  la salud propia, en el caso de la familia lo que se puede “enfermar” es la salud mental de todos los miembros.

"El centro de apoyo integral seguir creciendo ofrece a la comunidad su servicio la intervención en crisis familiares, por lo tanto si usted reconoce estar en alguna de las antes mencionadas o a alguien cercano,  lo invitamos a acercarse, conocer el servicio  y prevenir alguna complicación a nivel familiar, recordado que muchas veces gastamos dinero en cosas desechables o poco relevante, sin embargo invertir en nuestra familia, hijos o la pareja es una inversión realmente importante".

Dicho espacio se encuentra ubicado en  Avenida. Baquedano Nº 931,  en las dependencias de la Escuela de Educación Especial  “Divino Maestro”.Fono:93752957 o 85313720 o escribirnos al Email: "centroapseguircreciendo@gmail.com", y nos pondremos en contacto con ustedes. 

Atte. Equipo CONAOCHI San Anotnio